Lo que nadie te cuenta de las ferias.

Llevo yendo a ferias desde 2023, y una cosa me llama la atención: hablamos poco y mal de cómo nos va.
Sí, a veces tenemos una charla con frases ambiguas como «Bueno, me ha ido bastante bien.» o «Me ha ido mal, como mucho recupero.», y cosas por el estilo. Pero tenemos conversaciones desde puntos de vista muy diferentes en cuanto a objetivos de las ferias, y no sabemos si nos están diciendo que han ganado 100€ o 1.000€. Hay quien va a hacer unos pocos euros y pasarlo bien, quien quiere darse a conocer, quien quiere sacarse un sobresueldo o quien quiere ganarse la vida con ello. Hay quien tiene la feria al lado de casa y quien se gasta un quintal en el hotel y la gasolina para asistir. Quien imprime pegatinas en Asia y su beneficio es muy grande y el que imprime cómics y el coste es elevado. Y no es lo mismo el «bien» de uno que de otro.
Así que voy a hablar de mi experiencia desde 2023 asistiendo a ferias.
Lo primero de todo es especificar mis objetivos y condicionantes.
OBJETIVOS:
Ganarme la vida con esto.
Como no voy a hablar directamente de lo facturado en cada feria, quiero especificar qué es para mí «bien»:
Una vez descontado el coste que tiene asistir a la feria y el coste de la impresión de las obras, prints y merchan, considero que la feria me ha ido bien, sin tirar cohetes, si saco un beneficio (antes de impuestos) de entre 200 y 250€ al día.
Después de este cálculo, debo de restar el IVA de lo vendido y el IRPF, que depende de los ingresos anuales, que se llevarán entre el 14% y el 25%.
Pensad que en ese beneficio no cuento ni el tiempo que me ha llevado realizar la obra, ni el tiempo de preparación, desplazamiento y montaje de la feria. O sea que no es para tirar cohetes en absoluto.
CONDICIONANTES:
Vivo en Santa Coloma de Gramenet (cerca de Barcelona). Si a la feria puedo llegar en una hora o menos, voy y vuelvo el mismo día. Si es a más de una hora y más de un día, duermo en hotel barato. Si se tarda más de seis horas en llegar, duermo por el camino para no hacer todo el viaje del tirón.
Vendo cómics, cuentos y novelas autopublicadas, y algo de merchan de mi propia obra, de modo que no sería un artist alley al uso, sino que estaría entre el artist alley y la editorial pequeña. Algo peculiar...
Cabe destacar que he ido optimizando costes y que, con el tiempo, los márgenes de beneficio han ido creciendo. Además de haber ampliado catálogo y, por tanto, ampliando tickets de venta. Intentaré tenerlo en cuenta para juzgar las ferias más antiguas con una visión más actualizada.
Creo que con todos estos ingredientes, puedo empezar a desgranar mi experiencia, feria por feria y salón por salón. Eso sí, en el siguiente artículo.